La fase de transformación del agua simboliza el inverno, el frío, lo adaptable, así como nuestros impulsos, nuestra vitlidad, nuestra sexualidad y nuestro miedo.
Al agua están adscritos los órganos de los riñones y la vejiga, y también los oídos y los huesos. Según la concepación china, los riñones conservan el jing, la energía vital heredada.